El aceite esencial de bergamota se obtiene a través del prensado en frío de una planta preciosa – el
Citrus bergamia – perteneciente a la familia de las Rutaceae, es decir, una fruta cítrica fuerte y
amarga conocida por sus propiedades calmantes y antisépticas.
Según algunas leyendas, la bergamota tiene orígenes antiguas en las Islas Canarias, aunque otras
leyendas fijan su procedencia en la ciudad de Berga, también en España, y otras en Italia, en Reggio
Calabria. Es cierto que estos lugares se presentan como perfectos hábitats que hacen posible la
mejor fructificación de esta cítrica, cultivada también en otras partes del mundo como Argentina y
Brasil. ¡El aceite esencial de bergamota tiene efectos saludables sobre el organismo humano y no
sólo!
El aceite esencial de bergamota posee múltiples propiedades beneficiosas. La más conocida es, sin
duda, su propiedad antiséptica. Debido a sus propiedades antidepresivas y calmantes también es
muy común utilizar este aceite en presencia en situaciones de ansiedad, miedo y depresión. De
hecho, es un estimulante del buen humor que ayuda a restaurar la tranquilidad, la serenidad y el
optimismo, desempeña una acción relajante y contrasta los estados de ansiedad.
El aceite esencial e bergamota es energizante y revitalizante, contiene numerosas vitaminas como
la vitamina C, B1 y B2 que mejoran la absorción del hierro e iluminan la piel.
Muy conocidas son sus propiedades antioxidantes, debidas a la presencia de flavonoides que
aumentan la actividad de las enzimas con acción antioxidante, limitan la producción de radicales
libres en las paredes de los vasos sanguíneos y contrastan los mecanismos inflamatorios.
Otra de las propiedades saludables científicamente documentadas es su efecto anti colesterol, ya
que los flavonoides que contiene ayudan a bloquear las enzimas de la síntesis de colesterol. Además,
se ha demostrado que la bergamota contribuye a reducir los niveles de colesterol «malo», y a
aumentar los niveles de «bueno».
El aceite esencial de bergamota puede utilizarse en múltiples modos y ámbitos, desde la cocina al
salón, en la piel y en el pelo:
- En la cocina: unas gotas de aceite esencial de bergamota pueden enriquecer las ensaldas y
exaltar el sabor de carne blanca, pescado y quesos frescos per tambén aromatizar infusiones
y ser empleado en la preparación de coctéles. - En la piel:su furte acción antibacteriano y desinfectante hace que este producto sea utilizado
tambén en la piel, especialmente en caso de abscesos y acné y, por lo tanto, para purificar
las pieles más grasas. Para beneficiar de la acción sebo-regulador y distensiva de este aceite
es posible añadirlo a la crema de día o de noche, mientras que, para un efecto astringente
se puede añadir al tónico. Es muy común usarlo para mensajes corporales. - En el pelo: el aceite esencial de bergamota puede ser aplicado sobre el cuero para una acción
anti-caída o añadido al champú o máscaras para el cabello para una acción purificante. - Sobre el estado de ánimo: se utiliza comúnmente en aromaterapia para combatir
sentimientos de tristeza, ansiedad, estrés y estados de depresión, ya que ayuda a aportar un
estado de ánimo más alegre. De hecho, se aconseja utilizar algunas gotas de aceite esencial
de bergamota en los difusores ambientales para purificar el ambiente y desperdir su aroma
o añadir algunas gotas de aceite esencial en las sales de baño y beneficiar de las propiedades
relajantes, revitalizantes y aromáticas de la bergamota.
Sin embargo, el aceite esencial de bergamota tiene contraindicaciones en cuanto se trata de un
producto fotosensible. Se recomienda, por lo tanto, no exponerse inmediatamente al sol – o al
menos no antes de 12 horas – después de la aplicación del aceite en la piel, ya que puede causar
irritación y quemaduras. También es importante prestar atención a la fecha de caducidad del
producto y conservarlo en un lugar fresco y oscuro.