El aceite de ricino es la respuesta. Este elixir, usado desde la antigüedad, es el secreto detrás de una piel suave y un cabello espectacular. ¡Sigue leyendo para descubrir por qué el aceite de ricino es el aliado que tu belleza necesita!
Este aceite es extraído de las semillas de la planta Ricinus communis, ha sido un tesoro en el mundo de la cosmética por siglos. Rico en nutrientes y con propiedades increíbles, es el complemento perfecto para cualquier rutina de cuidado personal.
Los usos del aceite de ricino en la cosmética son muy variados, desde la hidratación intensa para la piel, proporcionar un cabello fuerte y brillante, fortalecer las raíces y promover el crecimiento del cabello… Hasta aumentar la densidad de las pestañas y cejas.
¿Qué hace al aceite de ricino tan especial?
El secreto está en su composición rica en ácidos grasos, especialmente el ácido ricinoleico, que constituye aproximadamente el 90% de su contenido. Sus propiedades clave: hidratante (mantiene la humedad en la piel y el cabello), antiinflamatorio (reduce irritaciones y calma la piel), antibacteriano (protege contra infecciones cutáneas), antioxidante (previene el envejecimiento prematuro de la piel).
